Dentro de un marco complicado, se desarrolló este encuentro. El mal momento de Independiente, con escasos 3 puntos en 7 partidos disputados, que días atrás provocara las idas de Garnero y Menotti, hacía que el aire resultara irrespirable en el Libertadores de América, en la previa del partido. Ello se tradujo en la hostilidad de los hinchas, que recibieron a huevazos al plantel, cuando arribó en el micro al estadio.
Necesitaba el Rojo un triunfo que aportara un poco de paz. Y ese gol de Leonel Galeano a los 27 minutos del primer tiempo fue desahogo, tras una semana de extrema tensión. No demostró demasiado en cuanto a lo futbolístico este equipo de Ricardo Pavoni y Francisco Sá, pero era indispensable ganar y lo hizo.
Algo más de calma tendrá la dirigencia para buscar al sucesor de Garnero. Tras la negativa de Gallego, los candidatos que más suenan son Pumpido y Fossati. Por lo pronto, Pavoni y Sá seguiran con su interinato y serán ellos quienes dirijan al equipo el martes, en el compromiso por la Copa Sudamericana ante el Defensor Sporting uruguayo.
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